El dinero me genera ansiedad, me quita el sueño en las noches, me resta tranquilidad y paz espiritual. Lidiar con las deudas, mantener la calidad de vida, invertir para el futuro, lamentarme por las malas decisiones del pasado, la angustia de no saber como lo conseguiré en el futuro, toda esta suerte de situaciones ocupa mi mente, haciendo de mi relación con las finanzas y el dinero un coctel molotov que siento puede explotar en cualquier momento.
La Planeación Financiera es la única herramienta (y lo digo con propiedad) que nos puede dar la paz financiera. No es el dinero, no son las cosas, no es el trabajo, ni siquiera vivir sin deudas. La única herramienta que nos puede dar tranquilidad y paz financiera HOY es organizar nuestras finanzas.
Hacer las paces con el pasado y rescatar las enseñanzas que nos haya dejado, nos permite abandonar los sentimientos de culpa, de arrepentimiento, de nostalgia, y nos empodera a vivir el presente. Dejar a un lado las fantasías catastróficas del futuro, la angustia de quedarse sin dinero, o de no tener la capacidad de producir nuevos ingresos, el desafío de crecer financieramente, el peso de salir de deudas. Dejar todo eso a un lado y enfocarnos en lo que realmente podemos hacer hoy, aquí y ahora, nos empodera a vivir el presente productivamente.
El dinero ha sido mi tema de vida. No por nada estudié finanzas y he dedicado los últimos veinte años de mi vida (la totalidad de mi vida profesional adulta) a estudiar las finanzas y las teorías de planeación financiera, y a la vez durante este tiempo me he desenvuelto como “planeador financiero”. Esa ha sido mi ocupación.
En esta última etapa de mi vida, que se junta con la crisis existencial de los 40 años, me he cuestionado el sentido de “planear” las finanzas. Si en verdad, ahora veo claramente, que lo único que importa es el momento presente... ¿Entonces para que planear? ¿Qué sentido tiene?
Es increíble, que me haya tomado 20 años darme cuenta del sentido real de la Planeación Financiera, el sentido realmente importante de la Planeación Financiera.
Empoderados en el presente, podemos explotar nuestro máximo potencial creativo. que es un proceso en dónde finalmente CREEMOS en nosotros mismos, en nuestra capacidad de CREAR algo útil para la sociedad, de agregar valor con lo que hacemos, y nos da el coraje de COMPARTIRLO, ese afán de servir, de entregar a la sociedad, de COMUNICAR nuestro valor de manera clara y asertiva. Perdemos el miedo de COMPROMETERNOS y presentamos ese valor, con ánimo, con seguridad, con orgullo y lo entregamos, CUMPLIMOS.
Finalmente, y en un acto de equilibrio universal, es claro para nosotros, y se hace evidente la recompensa, recibimos un agradecimiento y procedemos, sin miedo y totalmente agradecidos también a COBRAR por nuestro aporte. Se siente bien cobrar, se siente bien recibir, porque sabemos que hemos puesto nuestra alma, nuestra mente y nuestro cuerpo en eso que acabamos de entregar.
Es así como la Planeación Financiera, nos permite centrar toda nuestra energía en el presente, habiendo solucionado los asuntos del pasado que nos desgastaban, que nos ataban que nos limitaban y los asuntos del futuro que nos drenaban que nos angustiaban que nos congelaban.
La única herramienta que por fin me dará paz financiera y me permitirá vivir plena y abundantemente, enriqueciéndome con el sinfín de posibilidades que se nos han sido dadas, es la Planeación Financiera.
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